
Sandra Rocio Zabala Vasquez (Bogotá, 1999)
TEJIDOS, FÓSFOROS Y SÍLICE, 2020
Intervención en el espacio público natural.
20 piezas fabricadas con arena de río Guaviare y cmc, instaladas en la montaña de Villeta cerca al caudal de su río.
Dimensiones variables
Lo presentado en este espacio es parte de la documentación de una serie de esculturas realizadas con arena del río Guaviare instaladas en lo alto de la montaña de Villeta en noviembre del 2020.
Estas piezas ponen en duda la separación del hombre y la naturaleza. Partiendo de la etnia Nukak Maku, que ha mantenido su naturaleza nómada hasta la actualidad, propongo otras maneras de relacionarnos con el entorno alejadas del paradigma occidental moderno.
Una serie de esculturas de arena habitan temporalmente un espacio natural y reaccionan a él. Entendiendo la arena como una materialidad nómada (ya que atraviesa el mundo y también es parte de nuestro cuerpo), las porosas piezas recuerdan a la estructura celular de nuestros huesos evidenciando nuestra fragilidad en un entorno que para nada está bajo nuestro poder. La naturaleza y hombre son parte de un todo y la tierra que estructura al mundo es la misma que estructura a los humanos.
BIO.
Sandra Rocío Zabala Vásquez (Bogotá, 1999) es una artista colombiana, actualmente se encuentra finalizando sus estudios como Maestra en Artes Plásticas en la Universidad El Bosque. A lo largo de su formación se ha interesado en cuestionar cómo entendemos los ciclos de vida y muerte, repensándolos desde procesos naturales de transformación, sin principio ni fin.
Investiga las manifestaciones singulares de habitar el entorno, el ser en relación con su escenario y elementos creadores de vida. Busca desdibujar las fronteras entre la especie humana y el resto del mundo, por medio de acciones poéticas que se materializan en esculturas de gran formato, instalaciones, intervenciones en entornos naturales y elementos seriados de fabricación manual generando “iguales diferentes”.